Ahora que nos acercamos al ecuador de la década, los inversores se siguen haciendo muchas de las preguntas que se hacían a principios de la década de 2020. ¿Es sostenible la buena racha de los mercados estadounidenses? ¿Qué factores podrían impulsar los mercados internacionales? ¿Cómo afectarán los cambios en el comercio mundial y los aranceles a las empresas y la economía? ¿Y qué consecuencias tendrá todo ello en las carteras de inversión?
En esta extensa entrevista, el gestor de renta variable Rob Lovelace nos ofrece su opinión sobre la dirección que están tomando los mercados, el posible impacto de los aranceles en la economía mundial y ciertas temáticas que están impulsando sus decisiones de inversión.
¿Cuáles son, en su opinión, las perspectivas de la renta variable mundial de 2025 en adelante?
Llevo 40 años trabajando como gestor, y durante la mayor parte de mi trayectoria profesional siempre ha existido esa idea de dualidad entre los mercados estadounidenses y no estadounidenses. Si a unos les iba mejor durante un tiempo, luego la tendencia se invertía y les iba mejor a los otros. Estos ciclos solían durante entre diez y quince años. Estados Unidos lleva más de diez años siendo el mercado dominante, lo que lleva a los inversores a preguntarse si puede seguir siéndolo.
En mi opinión, la respuesta es que sí. Sigue habiendo muchas circunstancias que podrían favorecer al mercado estadounidense. Eso no significa que no podamos asistir a una corrección en los próximos uno o dos años. La renta variable estadounidense ha registrado máximos históricos recientemente, así que no sería de extrañar que experimentase un cierto retroceso.
No obstante, si pensamos en los próximos años, creo que Estados Unidos sigue contando con muchas ventajas, como una economía saneada, acceso al capital, abundantes suministros energéticos y un sector tecnológico líder en el mundo que continúa innovando (gracias, en parte, a sus sólidos vínculos con el ámbito académico) en áreas fundamentales como la inteligencia artificial (IA), el comercio electrónico y las redes sociales.