Capital IdeasTM

Perspectivas de inversión de Capital Group

Categories
Indicadores económicos
¿Por qué la próxima recuperación económica podría ser más fuerte de lo esperado?
Jared Franz
Economista

Los inversores no han dejado de hacerse tres preguntas en los últimos meses: ¿va a haber una recesión? ¿Cómo será de grave? ¿Y qué pasará después?


La agresiva campaña de subidas de tipos de interés que ha puesto en marcha la Reserva Federal de Estados Unidos para combatir la persistente inflación ha acentuado el riesgo de recesión. La inestabilidad que ha registrado recientemente el sector bancario, que probablemente se traduzca en un endurecimiento de las condiciones de crédito, podría agravar dicho riesgo.


«Uno de los indicadores más fiables de una recesión es la inversión de la curva de tipos, que se produce cuando el rendimiento de los títulos del Tesoro a corto plazo supera al de los bonos a más largo plazo», afirma el economista estadounidense Jared Franz. «La actividad que han registrado últimamente los mercados de renta fija apunta a una recesión. De hecho, podríamos estar ante la recesión más anunciada de las últimas décadas».


La inversión de la curva de tipos advierte del riesgo de recesión

Fuente: Capital Group, Bloomberg Index Services Ltd., Oficina Nacional de Estudios Económicos de Estados Unidos, Refinitiv Datastream. Información a 31 marzo 2023.

Aunque muchos inversores están pensando en el momento y en el grado de gravedad de la próxima recesión, Franz se hace preguntas a más largo plazo: ¿cuáles podrían ser los factores catalizadores de la recuperación posterior? ¿Y qué consecuencias podría tener dicha recuperación en las carteras de inversión?


«Cuando existe una visión muy extendida, puede resultar complicado beneficiarse de ella, ya que es posible que los mercados ya la descuenten», señala Franz. «En su lugar, quizás los inversores deberían prepararse para lo que, en mi opinión, será una recuperación más intensa de lo habitual, impulsada por la buena situación del sector de consumo».


En este artículo, Franz comparte sus perspectivas sobre la recesión y la posible recuperación posterior.


¿Ha entrado ya Estados Unidos en recesión?


Creo que estamos al borde de la recesión. La inflación sigue superando el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal y se mantiene la rigidez del mercado laboral, así que el banco central aún tiene trabajo por hacer. Es posible que, ante la reciente inestabilidad del sector bancario, la Reserva Federal modere su enfoque de subidas de tipos, pero creo que seguirá subiendo los tipos de interés hasta que la inflación se ralentice un poco más.


En mi opinión, el producto interior bruto (PIB) podría caer un 1,0%, lo que se consideraría una recesión leve. De hecho, sería considerablemente más suave que la caída del 4,5% a la que tuvieron que enfrentarse los inversores durante la crisis financiera mundial entre los años 2007 y 2009, y estaría más próxima a una recesión más convencional. Con ello no quiero restar importancia al impacto de la recesión en las personas. Las recesiones pueden ser muy dolorosas, aunque sean leves.


La debilidad del mercado de la vivienda es otro factor de riesgo. Las ventas cayeron en marzo, lo que provocó caídas en los precios de la vivienda por segundo mes consecutivo. A partir de aquí, los precios podrían registrar una nueva caída de un 10% y una reaceleración posterior, lo que contribuiría a limitar el deterioro de los balances de los hogares y podría impulsar la confianza de los consumidores.


¿La próxima recuperación será más fuerte o más débil que las anteriores?


Si la hay, creo que hay dos razones para que la recuperación sea más fuerte que en ciclos anteriores. En primer lugar, es posible que no se necesite poner en marcha un proceso de desapalancamiento a gran escala como el que se produjo durante la crisis financiera mundial. Muchas compañías ya preveían un periodo de debilidad económica y han tomado medidas, retrasando los pedidos para eliminar los excesos de la economía. Por lo tanto, aunque es probable que este año se produzca una recesión, espero que sea algo superficial.


En segundo lugar, el sector de consumo en Estados Unidos es sólido en relación con ciclos anteriores. La buena situación del mercado laboral, el crecimiento salarial y el nivel de renta de las familias podrían favorecer una recuperación más sólida.


No cabe duda de que el mercado laboral estadounidense se ha moderado recientemente, y una recesión, sea cual sea su magnitud, podría aumentar el desempleo a medida que las compañías anuncien próximos despidos. Pero el mercado laboral continúa mostrando una gran solidez: en marzo se crearon 236.000 puestos de trabajo. ¿Por qué? Los cambios estructurales que se han producido en el mercado laboral han modificado la dinámica de la oferta y la demanda.


A finales de marzo, la tasa de desempleo se situaba en el 3,5%, cerca de su nivel más bajo en las últimas décadas. El desempleo irá aumentando a medida que la economía se vaya ralentizando, pero creo que alcanzará su nivel máximo en torno al 5,0% y caerá con mayor rapidez que en ciclos anteriores. Además, desde el inicio de la pandemia, las tendencias de trabajo desde casa, junto a la relocalización de las cadenas de suministro en Estados Unidos y el desarrollo de las energías sostenibles, han impulsado el salario real, especialmente en el caso de los trabajadores de rentas medias y bajas.


Por otro lado, en el momento actual del ciclo, los consumidores presentan unos niveles de deuda reducidos en relación con los que se registraban tras la crisis financiera mundial o incluso tras otras recesiones más típicas. A finales de 2022, el servicio de la deuda familiar como porcentaje de la renta se situaba en el 9,7%.


La situación de los consumidores es mejor ahora de lo que era en recesiones anteriores

Fuente: Capital Group, Junta de Gobernadores de la Reserva Federal, Oficina de Estadísticas del Mercado Laboral de Estados Unidos, Oficina Nacional de Estudios Económicos. La tasa de desempleo refleja la tasa total de desempleo desestacionalizada. Los pagos de servicio de la deuda familiar como porcentaje de la renta disponible total están desestacionalizados, y el componente de servicio de la deuda incluye los pagos hipotecarios y los pagos programados de la deuda de los consumidores. Datos trimestrales a 31 diciembre 2022.

¿Qué otros factores podrían favorecer una recuperación impulsada por el consumo?


En mi opinión, la moderación de la inflación podría impulsar el consumo. Aunque la Reserva Federal aún tardará un tiempo en alcanzar el objetivo de inflación del 2,0%, creo que podría contenerla en torno al 3,0%. Los estudios académicos han demostrado que el consumo no suele sufrir un impacto significativo con una inflación en torno al 3,0%. Es probable que una inflación contenida impulse la confianza de los consumidores. Y, si los salarios se mantienen, podría parecer un aumento del salario real. En mi opinión, la inflación podría situarse entre el 2,0% y el 2,5% en 2025.


También creo que la automatización y la creciente adopción de la inteligencia artificial favorecerán un aumento de la productividad, lo que podría contribuir a gestionar el aumento de los costes laborales. No obstante, no creo que dicho aumento de la productividad vaya a contrarrestar las necesidades de contratación de corto a medio plazo.


También espero que tras la recesión aumente la demanda de viviendas. Los cambios demográficos y el aumento de la formación de hogares (considerados como un grupo de individuos que tienen la intención de vivir juntos) apuntan a un posible repunte de la demanda de viviendas. Además, la popularidad del trabajo remoto podría impulsar la demanda de construcción de viviendas en la periferia de las ciudades y en localidades más pequeñas.


¿Qué consecuencias tiene todo esto para los inversores?


En mi opinión, los sólidos fundamentales del mercado laboral, la buena situación de los balances de los hogares y la moderación de la inflación podrían favorecer un crecimiento del 3,0% del sector de consumo en Estados Unidos. Es un dato importante, ya que el consumo representa en torno al 67% de la economía estadounidense. Cabe destacar que una recesión provocará una cierta contracción del mercado laboral, pero creo que este repuntará posteriormente.


El nivel salarial y la confianza de los consumidores podrían impulsar el consumo, lo que beneficiaría a una serie de sectores, como el de los viajes y el ocio. Además, la recuperación del mercado de la vivienda podría impulsar, no solo el gasto en construcción, sino también el gasto en otros bienes duraderos, como los electrodomésticos.


Históricamente, el mercado de renta variable ha tendido a anticiparse a las recuperaciones, repuntando antes de que se produzca el cambio de tendencia en la economía.


Después de registrar fuertes caídas, los mercados se han recuperado con relativa rapidez

Fuente: Capital Group, RIMES, Standard & Poor's. Información a 31 diciembre 2022. Las caídas del mercado se basan en los cinco descensos más importantes del valor del índice S&P 500 (sin incluir los dividendos ni las distribuciones) con una recuperación del 100% tras la caída en cuestión. La rentabilidad de los años posteriores al mínimo es la rentabilidad a 12 meses basada en la fecha de dicho mínimo. El porcentaje de caída se basa en el valor del índice no gestionado S&P 500, sin incluir los dividendos ni las distribuciones. La rentabilidad media anual total incluye la reinversión de los dividendos y las distribuciones, pero no refleja el efecto de las comisiones, los gastos o los impuestos. Los resultados obtenidos en el pasado no son indicativos de resultados futuros.

 



Jared Franz es economista y cuenta con 18 años de experiencia en el sector de la inversión (a 31 diciembre 2023). Es doctor en Economía por la Universidad de Illinois de Chicago y licenciado en Matemáticas por la Universidad de Northwestern.


Las rentabilidades obtenidas en el pasado no garantizan rentabilidades futuras. No está permitido invertir de forma directa en un índice, que no se gestiona. El valor de las inversiones y las rentas generadas por las mismas pueden subir o bajar y es posible que los inversores no recuperen los importes invertidos inicialmente. El presente material no pretende ofrecer ningún tipo de asesoramiento de inversión, fiscal o de cualquier otra naturaleza, ni constituye una oferta ni una solicitud de compra o venta de valores.

Las declaraciones atribuidas a una persona concreta representan las opiniones de dicha persona en la fecha de la publicación, y no reflejan necesariamente las opiniones de Capital Group o de sus filiales. Salvo indicación en contrario, la información contenida en el presente documento se refiere a la fecha indicada. Es posible que alguna información haya sido obtenida de terceros y, por lo tanto, la fiabilidad de dicha información no está garantizada.

Capital Group gestiona activos de renta variable a través de tres grupos de inversión. que realizan inversiones y toman las decisiones relativas a la delegación de voto de forma independiente. Los profesionales de la inversión en renta fija proporcionan análisis y gestión de la inversión de la renta fija en toda la organización. No obstante, en lo que respecta a aquellos títulos con características de renta variable, actúan exclusivamente en nombre de uno de los tres grupos de inversión en renta variable.